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lunes, 23 de agosto de 2010

Yo quiero navegar en lo prohibido

Yo quiero navegar en lo prohibido
y quiero al fin hundirme en los secretos,
no quiero que las burlas del olvido
destrocen mis ayeres indiscretos.

¿Acaso el que juzga no es culpable?
¡Acaso el que denigra es desleal!
Prefiero ser un tonto muy amable
que hacerme juez severo o juez teatral.

Yo quiero distraerme en lo imposible
y hacer de mis silencios sabia senda
prefiero que mi vida sea risible
a vérmela cubierta con la venda
de un odio hacia mí mismo y hacia el mundo
por miedo a transformarme en iracundo
espejo de un fracaso gigantesco.

Merezco más, lo sé, yo lo merezco…

Recién Nacido

Me ha nacido la esperanza
de forjar la nueva alianza
con la vida misteriosa
que me dona, majestuosa
un rayito de alegría
envuelto en la melodía
del amor que te engendró.

Tu sonrisa y tu mirada
son la dulce llamarada
que devuelve claridad
a mis días, a mi edad.
Tú; pedacito de amor
que del amor haz surgido;
tú, admirable candor
que por amor has nacido;
te damos la bienvenida
a este mundo que ya embelleces
con tu sola presencia.

Bendito rayito del cielo
que me has devuelto el anhelo
de alcanzar más altos fines;
entre ángeles y querubines
jugueteaba tu alegría
hasta el maravilloso día
en que llegaste a esta morada
llenándola de poesía.

Noche violenta

Es la noche la enemiga
de la paz que se incomoda
ante la ausencia toda
de quietud o mano amiga.

Es la noche la engañada
por las lunas escondidas
que propinan embestidas
de soledad naufragada.

Ya se acerca el tiroteo,
ya el puñal ondea en el viento;
se oscurece el firmamento
ante todo lo que veo.

Un disparo se oye lejos
otro más algo más cerca,
si la maldad será terca:
bañando de ríos bermejos
las calles de la ciudad
y las almas de impiedad…

Es la noche difamada
por los odios desmedidos
en que se hayan metidos
los de mente violentada…

Es esta noche cansada
la que huye del fragor
causado por el dolor
de los que lloran difuntos
y se esconde; ¡casi nada!
bajo costuras y puntos
en quirófanos andantes
de hospitales comediantes.

Es la noche malherida;
como esta noche bandida
la que a mi fe despedaza,
la aniquila y la amordaza.

Beso Eterno

La Mar Costera besa al Cielo Diurno
y se forja así
el horizonte
inalcanzable
ineludible
apasionado
etéreo:

Ósculo eterno entre Cielo y Mar;
beso público a ojos vista;
natural, espontáneo, hermoso,
soldado al panorama,
brocado en el paisaje;
evocándonos continuamente
vergonzosas alegrías
de añejos rubores
en ese primer beso
que se evaporó al instante
y sin embargo
persiste en el recuerdo
pues jamás se olvida.

Magdalena

Magdalena pura, Magdalena bella,
Magdalena llora lágrimas de estrella;
Magdalena clara, Magdalena inerte,
Magdalena aguarda el beso de la muerte.

Se hunde en las tinieblas sin dejar más huella
que un silencio parco que la tarde mella;
Magdalena triste, ¿dónde está tu suerte?
¿dónde esa alegría que te hacía tan fuerte?

Llueve en tus mejillas cual si fuera invierno;
¿cómo es que tu vida se volvió un infierno?

Magdalena pura, Magdalena bella
llora amargamente lágrimas de estrella:
¿Quién le habrá quitado brillo a su sonrisa?
¿quién robó su gozo, quién hurtó su risa?
¿quién ajó el verdor trajeado con la brisa?

 Magdalena linda, Magdalena hermosa,
¿Quién lanzó tu esmero al fondo de una fosa?
¿Quién es el culpable de tu llanto amargo?
¿Quién puso en tu alma tan hondo letargo?

Magdalena clara, Magdalena inerte
ya no pide más que el beso de la muerte…

Amor infantil

Con un trompo sin cabuya
jugaré a las galaxias
y un bolígrafo sin tinta
me será nave espacial.

Me hundiré bajo la bulla
que generan las ataxias;
con un metro como cinta
mediré otro Santo Grial.

Tú me harás de Universo
yo te haré de pedernal
y una chispa de reverso
ya se enciende magistral.

Tú serás todo mi verso
yo seré más que normal
tú; el pétalo más terso
del jardín multiversal.

Con un trompo sin cabuya
y un bolígrafo sin tinta
es que mi alma es casi tuya
y el amor se nos precinta.

Si me enfrento al amor

Si me enfrento al amor
con las armas del bien
no serán más de cien
los instantes desnudos,
ni los gritos que; mudos,
desafían al dolor
del recuerdo pausado
de ese beso pasado
que regresa pesado
sin clemencia ni ardor.

Si me enfrento al amor
con las armas del mal
no será sino sal
el recuerdo enfrentado
al segundo pisado
por ingente clamor,
sin tus besos deseosos
sin mis aires furiosos
sin amores dolosos
encendiendo el temor…

Ya no queda más tierra
que pudiera pisar,
sólo observo una guerra
al tratarte de amar
y la pierdo y la pierdo
y la vuelvo a perder
y me siento tan lerdo
que no puedo ni ver;
y me siento cual cerdo
que te quiere comer….

Jah jah jah jah jah jah jah jah

Ahora es mi momento

Un soplo de tristeza golpea el firmamento,
un soplo de alegría asiste al viandante,
ya no es la tierra mía el goce del momento
sino la estratósfera; morada del amante.

Repliego pues mis alas en busca de descanso
renuevo mi energía hallando en ti consuelo,
y vivo a la medida del último remanso
poniendo ante tus ojos, mis ojos cual pañuelo.

Otrora fuiste sueño de flores y jardines
y fuiste la esperanza de única morada;
ahora eres reina de aromas de jazmines
y sombra de un ayer que calla su coartada.

Ahora es mi momento de magias y conquistas.
Ahora es el ahora en que alzo mi blasón.
Yo soy el soberano, el héroe de mis vistas;
yo soy el que renueva su alma y corazón

Yo soy el impecable, el pulcro, el cristalino,
y soy el comediante, alegre y festivo,
yo soy la claridad y el aroma del vino,
y soy todo el poder del júbilo furtivo.

Del júbilo eterno soy yo el lugarteniente,
del gozo interminable soy yo el poseedor,
extiendo yo mis brazos al sueño inconsciente;
consciente de ser yo el hijo del Amor.

Exijo mi premio

Ovillo de penas
enredo de angustias…
¿Por qué las condenas?
¿Por qué las cadenas?

Suspiro en colmenas
repletas de avispas
sin rastros de miel,
¿por qué las cadenas?
¿por qué las condenas
anuncian más hiel?

Persigo mi herencia
exijo mi premio
feliz quiero ser
uniéndome al gremio
de los soberanos
de su propio ser.

Y mi recompensa
ya quiero obtener
no basta, no basta
con fútiles dádivas
que no puedo ver…

Exijo mi premio
yo quiero mi herencia
Dios dame lo mio
pues ya me cansé.
Dios dame mi Reino…

Primera vez

Un hastío improviso me toma y me viste
en un parpadear insolente y permitido,
mi mano midiendo tu cuerpo de alpiste
encuentra temblorosa, el fruto prohibido.

De pronto me sereno, cual ave en su nidal
de pronto todo es bueno,las rosas y el rosal.
Y olvido las espinas que afincan el dolor
la sangre, el sentimiento, el roce y el pudor

De pronto me resisto, de pronto hay temor
y pasándole revista a tu glorioso seno
de pronto te enveneno, de pronto me condeno

Un hastío improviso me toma y persiste
en un tolerar lo inadmisible. ¿Viste
que ese cuento no te lo comiste…?

Prefiero un ensueño

Les digo que prefiero un ensueño
a otra mendigante de cariño,
les digo que prefiero ser el dueño
de este corazón con faz de niño.

A veces sin querer hacemos daño
y a veces más daño recibimos
a veces nos mostramos algo huraños
y a veces la pasión nos la prohibimos.

Por eso es que nos llaman animales
porque a veces lanzamos “te-quieros”
como si fueran puñales

Por eso es que nos llaman humanos
porque a veces lanzamos puñales
como si fueran “te-amos”

Llovizna ligera

Llovizna ligera 
sobre un desierto arso y difunto.
Cambian las huellas sobre las dunas,
cambia el calor por frío nocturno
y bajo la luna
llovizna ligera, baña las fuentes
de arenas eternas,
de vientos silentes
y muy bulliciosos, 
en los confines de lo inconcebible;
donde todo es posible…

Aun todo es posible.
Llovizna liviana
de suave frescura alivias mi sed
de ternura……

Llovizna liviana que sacia la sed
de arsos desiertos cubiertos de dunas,
no existe la luna en este universo,
ni existe un verso que pueda cantar
las ansias de un cielo cubierto de nubes
o la sonrisa de mi querube
interior.

Me gusta el tango

Me gusta el tango
pues como el tango yo también
salí de los sórdidos barriales
buscando el cielo.

Me gusta el tango
pues como el tango yo igual
canto a mi pasado enmohecido
y a mi grandeza actual.

Y como el tango
que desde el fondo del averno
ascendió a cima entusiasta
yo también
transformaré el frío de mi invierno
en primavera tibia y casta
con la inocencia original de mi universo
rima a rima, verso a verso.

Poetas somos todos

Por qué te empeñas en apagar
las lucecitas tenues y difusas
que apenas comienzan a brillar
en la oscuridad profusa?
¿Por qué te ensañas con novatos
que dan apenas sus primeros pasos
entre símiles, metáforas y alegorías
con dicha plena y genuina algarabía?

¿Por qué erosionas inquietudes tempranas
transformándolas en esperanzas vanas?
¿Es que no ves que la poesía es simiente
ajena a todos nosotros, que a nadie pertenece?
¿Es que no sientes que vibra en el ambiente?
La poesía, amigos, en el aire se mece…

Es poeta el carpintero tallando la madera
con toques cadenciosos de versos cincelados…
de verbos y palabras presentes en esferas
que cubren con sus mantos los sueños apagados.
Es poeta el murador que entre bloques y cemento
levanta paredes, blasonando sus lamentos.
Es poeta el bodeguero vendiendo mercancías
con brotes de leyendas, con orbes de empatía.
Es poeta el plomero que acoda tuberías
en sendos laberintos de húmeda poesía.
Es poeta el borrachito que canta, gime y grita
sus remembranzas lúgubres, sus hórridas cuitas

Es poeta el doctor que nos devuelve la vida
sacudiendo el dolor y zurciendo las heridas.
Es poeta el navegante que besa el horizonte
con su mirada ignota de cerros y de montes.
Es poeta el campesino que labra su conuco
con sueños de aviador, con ansias de bejuco.
Es poeta el herrero que forja los metales
con alma de infante y furia de animales.
Es poeta el alfarero que modela su arcilla
con manos callosas y aspiraciones de ardilla.
Y es poeta el sudor que baña nuestros rostros
son versos las risas, las lágrimas, los arrostros.

Poetas somos todos aunque no lo sepamos
y la única diferencia entre un poeta y otro
es que unos expresamos los versos con la pluma
y otros los escriben con fatiga de sus manos.

Por eso yo te pido, te ruego pues hermano
que dejes de juzgar al corazón valiente
que osa expresarse en medio de la gente…